Hace solo unos días 'La Cope' apuntaba que Isco Alarcón saldría de inicio en el choque de la gran final de Cardiff, dejando de este modo en el banquillo a Gareth Bale.
El de Arroyo de la Miel parece haber convencido al cuerpo técnico de que él es el hombre que debe estar en el césped de Cardiff. A la afición ya la tenía de su lado hace mucho tiempo, de hecho es el preferido de la grada blanca.
Así que, según parece, la magia de Isco será una de las armas del Real Madrid de Zidane para levantar la 'orejona' el tres de junio ante la topoderosa Juventus de Buffon, Alves, Dybala y compañía...
Es cierto que el malagueño entró en el once blanco por la lesión de Bale, pero desde su inclusión hasta ahora ha dejado muy claro que cuando él está en el campo, el Real Madrid no pierde. Es un seguro de vida para el conjunto de Chamartín y 'Zizou' parece que se ha dado cuenta.
Desde que el Madrid cayó ante el Barça en el Bernabéu, Isco ha sido indiscutible en los planes del técnico francés, y es que el ex del Málaga presenta unos números impresionantes, no ha conocido la derrota en los 30 partidos de Liga que ha disputado.
De hecho, las tres derrotas del equipo blanco en Liga llegaron cuando el centrocampista malagueño no estaba en terreno de juego. Una de ellas, ante el Sevilla, se la perdió por lesión y las otras dos, ante Valencia y Barça, por decisión técnica.
Pues ahora llega la Champions y Zidane se la jugará el título con Isco Alarcón sobre el terreno de juego. Aunque ya estuvo en las dos finales de Lisboa y Milán, nunca lo hizo como titular. Cardiff está a la vuelta de la esquina e Isco ya está preparado para repartir su magia.