Los hechos ocurrieron el 11 de noviembre de 2007. Un policía quiso disolver una pelea que estaba teniendo lugar en una gasolinera en una autopista. Hinchas de la Lazio, camino a Milán, y de la Juve, camino a Parma, coincidieron en el concurrido nudo viario italiano. Y comenzó la pelea.
La Policía intervino y un agente desenfundó su arma para intentar disolver a los participantes en la misma. Pero algo salió mal. Terriblemente mal.
Su disparo, teóricamente disuasorio, al aire, segó la vida del joven Gabriele Sandri, fallecido como consecuencia del mismo. Cuando se conocieron los hechos, el fútbol italiano reaccionó con indignación.
Las llamadas a la calma de la Policía de nada sirvieron, y los hinchas del Atalanta obligaron a que se suspendiera su partido contra el Milan.
Hoy, diez años después, y aprovechando el 'Derby della Capitale' entre Lazio y Roma, la aficion 'biancocelesti' recordó a su compañero fallecido con un emotivo homenaje que unió a los dos grandes rivales que hoy se enfrentaban.
La familia de Sandri saltó al césped del Olímpico de Roma y agradeció a los espectadores congregados en el estadio el homenaje. Por un momento, la rivalidad irreconciliable entre estas dos aficiones se dejó de lado por algo más importante. El recuerdo de un hecho que jamás debió haber ocurrido.
Solo emozione per #GabrieleSandri! #RomaLazio #DerbyDellaCapitale pic.twitter.com/uta01s1vxe
— Alessia N⚽️velli (@Alessia_Nov) 18 de noviembre de 2017