Necesitaba la Juventus un empujón justo cuando el Sporting de Lisboa vencía a domicilio. Un toque de clase que igualara la contienda y cambiara el panorama. El que Pjanic regaló a la afición 'bianconera'.
En una falta en la frontal, el centrocampista bosnio tomó el balón y chutó con precisión con su pierna derecha. Un golpeo imparable ante el que nada pudo hacer el cancerbero rival.
Ni lo intentó el portero, genial Pjanic. pic.twitter.com/Co4nghGpLB
— La Voz del Calcio (@lavozdelcalcio) 18 de octubre de 2017