Para empezar, la gran estrella del choque, Leo Messi, ampliamente discutido por su escaso impacto ante PSG y Juventus, demostró que quiere volver a recuperar el trono del fútbol mundial con un partido perfecto.
Además de él, Ter Stegen sacó sobresaliente en su debut en el Bernabéu, con un repertorio de paradas sólo al alcance de su compatriota Manuel Neuer.
No tuvieron su mejor día Paco Alcácer y André Gomes, que siguieron aumentando sus dudas de cara a su futuro en el Barcelona.
Por parte blanca, Keylor Navas se olvidó de los pitos y salvó a su equipo mientras pudo con varias paradas de mérito, aunque no pudo hacer nada en los tantos del Barcelona.
Además de él, James salió para marcar y reivindicar su escaso papel en el equipo esta temporada, algo que incluso manifestó de manera física sobre el terreno de juego tras anotar el momentáneo 2-2.
Lo de Asensio, por su parte, ya no es una reivindicación. A cada partido que pasa, el jugador blanco demuestra más y más que merece un sitio en el equipo. Ojo con él en el futuro.