Empató el Celta en el Camp Nou y la Liga recobró un interés que no tenía desde el inicio del campeonato. Lograron los vigueses lo más difícil en un campo en el que el Barcelona no fallaba desde hacía exactamente un año, en el 'Clásico' de la 2016-17 (1-1). Se convirtieron, además, en los primeros que le marcan esta temporada dos tantos al Barcelona en Liga y también en los primeros que le remontan un partido a los 'culés'.
Comenzó dormido el Barcelona y terminó por pagarlo en el partido que abría la jornada del sábado en la Liga. Los azulgranas fueron un equipo desconocido desde el inicio y el Celta volvió a sacar un resultado positivo ante un Barcelona al que en los últimos años parece haberle tomado la medida.
Se pareció más el equipo azulgrana al de Luis Enrique que al de Valverde y el Barça-Celta fue una ruleta rusa en la que cualquiera pudo vencer, aunque los locales tuvieron en conjunto más y mejores ocasiones. Tardaron en desperezarse los del 'txingurri' y no lo lograrían hasta el 0-1 de Aspas, que evidenció el mal momento de forma de Piqué y el bueno de Ter Stegen. Falló el central y reaccionó de manera espectacular el alemán ante Maxi Gómez, pero no pudo hacer nada ante el segundo remate a bocajarro del internacional español.
Pero Messi tenía ganas de marcha y no dejaría que el partido estuviera en desventaja mucho tiempo. Una combinación del argentino con Suárez y Paulinho la acabó culminando Messi por debajo de las piernas de Rubén Blanco para hacer el 1-1. Prácticamente acababan de sacar de centro los 'culés', que pudieron hacer el 2-1 en la franja central de la primera mitad (palo de Messi y remate de cabeza de Paulinho), pero perdonaron y acabaron dando vida al Celta.
El Celta no se rinde.
Los vigueses no sólo lo intentaron de nuevo al final de la primera parte con un excepcional Sisto, sino que aguantaron el tipo en la segunda mitad sin encerrarse. Y es que Unzué sabía cómo jugar a este Barcelona y el Celta siempre tuvo oportunidades de rascar algo al contragolpe.
El Barcelona, eso sí, tuvo muchas más y pudo adelantarse gracias a la enésima combinación entre Messi y Jordi Alba. El lateral puso el pase de la muerte y un mejorado Luis Suárez no perdonó. Fueron de nuevo los mejores momentos de un equipo azulgrana que tuvo el 3-1, pero que perdonó y dio vida al Celta.
Un contragolpe de los celestes, en el que se lesionó Umtiti, lo culminó Maxi Gómez tras el pase de la muerte de Iago Aspas y el partido ganó en intensidad en el último cuarto de hora. A los celestes ya no les importó echarse totalmente atrás y sufrieron en sendas acciones de Piqué (remate al palo), Messi y Alcácer, aunque también pudieron llevarse el partido si Ter Stegen no le hubiera sacado un balón espectacular a Sisto.
Va perdiendo margen de error en líder y suspiran por aprovechar el pinchazo sus perseguidores, en tanto que el Celta se va orgulloso de haber sido el primer equipo en puntuar en el Camp Nou desde el Real Madrid hace exactamente un año.