El pivote del Levante, nada más cabecear hacia la portería canaria un balón centrado desde banda izquierda, corrió hacia las cámaras cruzando los brazos.
Este gesto simbolizó una queja dirigida para Libia, país en el que el mercado de esclavos de hombres de color está a la orden del día. Con sus brazos cruzados pidió libertad para ellos. Precioso gesto.
La celebración de Cheick Doukouré (Levante) reclamando la libertad de los esclavos negros en Libia.
Bravo