Minuto 93. El partido agonizaba. El Madrid había sufrido, se había complicado innecesariamente un partido que debería haber resuelto, pero Marcelo había devuelto la paz al Bernabéu.
Era el momento de perder tiempo. Falta en el centro del campo. Va Ramos a sacarla, pero aparece Cristiano Ronaldo. ¿Qué pinta Cristiano tan atrás para sacar una falta en tierra de nadie?
No, no la iba a colgar. Iba a perder tiempo y a forzar la quinta amarilla que le exima de jugar en Granada, y le permita estar limpio hasta final de temporada. Más claro, el agua.
Pero Casemiro no se enteró de qué iba la fiesta. Vio que Cristiano, tras el balón, no sacaba, y que Kroos estaba en banda, sólo. Pues para tí que va, Toni.
Cristiano, alucinando, le llamó la atención al central Brasileño. Se encogió de hombros y le pidió explicaciones. Pero Casemiro seguía a lo suyo, devolución de Kroos y, hale, a jugar. Y es que hay días en los que es mejor no salir de la cama. Menos mal que Cristiano sí vio puerta hoy.
Momento en el que @Cristiano intenta forzar la 5 tarjeta y Casemiro no le deja sacar. El 7 alucina. Ronaldo no quería ir a Granada pic.twitter.com/rIe8wsKayR
— Alberto Pereiro (@AlbertoPereiro) 29 de abril de 2017