Ocurrió hace exactamente 28 años, cuando el que fuera durante tres años ídolo del conjunto católico de las rayas verdes y blancas anunció su fichaje por el club protestante de la ciudad. Fue el único día, en los 129 años desde que se jugó el primer derbi entre el Celtic y el Rangers, en el que los aficionados de los dos gigantes del fútbol escocés se hermanaron en un sólo sentimiento.
Bill McMurdo, que fue representante de Johnston durante varios años, recordaba:"Para muchos se trataba de un conflicto religioso y existía una norma escrita que estipulaba que el Rangers no fichaba jugadores católicos".
Era la figura de la Selección de Escocia durante los años 80, y antes de marcharse dos años al Nantes francés, militó tres temporadas en el Celtic, anotando un total de 52 goles. Llegó a asegurar que no jugaría en otro equipo escocés que no fuese el Celtic, pero la realidad es que a esas alturas ya se estaba 'cocinando' el fichaje por el Rangers.
"Muchas veces le hablaba a Maurice sobre la posibilidad de jugar un día en el estadio de Ibrox y él se mataba de la risa, diciendo que era algo que nunca iba a pasar, que tendría que esconderse en un castillo para protegerse", recuerda McMurdo. Según McMurdo, la única razón por la que un aficionado del Celtic se pasaría al Rangers debía ser el entrenador, y en el caso de los protestantes se trataba del mítico ex jugador del Liverpool Souness, quién pidió expresamente a Johnston para su equipo, por lo que éste no se lo pensó dos veces, y puso rumbo a Ibrox Park.
"Él sabía que iba a haber problemas, tanto por los hinchas de Rangers como por los de Celtic, por lo que había una cláusula en el contrato que estipulaba que si su vida se hacía insostenible él podía salir hacia otro club", continúa recordando McMurdo. El fichaje se mantuvo en secreto hasta el día de su presentación, en el que la rueda de prensa fue un auténtico caos.
Los días previos al primer derbi entre Celtic y Rangers se produjeron amenazas de muerte tanto a jugador como a representante. El destino quiso que fuese Jonston quien marcara el primer gol de los Rangers y lo celebró con toda su alma frente a su nueva afición. En ese instante su alma pasó de verde y blanco a azul oscuro para siempre.
Desde entonces el Glasgow Rangers ha fichado muchos jugadores católicos, algo impensable antes de que lo hiciese 'Mo'.