Cesc Fábregas ha vuelto a ser protagonista por su conducta antideportiva. El mediocentro catalán fue amonestado en el primer tiempo, tras la expulsión de Gary Cahill.
El futbolista de 30 años vio la segunda tarjeta y dejó a su equipo con nueve por una entrada fea que bien pudo costarle la roja directa, a falta de diez minutos para terminar un encuentro que el Chelsea acabó perdiendo 2-3 ante el Burnley.
Fuerte entrada de Cesc Fabregas qué le cuesta la segunda amarilla, con 9 el Chelsea 1-3 Burnley en la #PremierLeague. pic.twitter.com/SM3kvIo7GS
— Marc Morote (@Tiexable) 12 de agosto de 2017