Las carreras profesionales de los futbolistas se extienden cada vez más, llegando en algunos caso a los 40 años, o incluso superándolos. Si bien es cierto que en la mayoría de los casos lo suelen hacer en ligas o campeonatos menores, lo cierto es que continúan en activo y en el ámbito profesional, lo que hace algunas décadas sería impensable para jugadores de tales edades.
A propósito de la grave lesión de rodilla que sufró la semana pasada el internacional sueco Zlatan Ibrahimovic, y que lo mantendrá alejado de los terrenos de juego entre 8 y 9 meses, muchas han sido las voces que han comentado la posible retirada del genio sueco. Sin embargo, el delantero del United se ha apresurado a desmentirlo, y ha lanzado a sus fans un mensaje positivo mostrando la fuerza y ganas con las que afronta la lesión y su recuperación, insunuando que no piensa en la retirada.
El sueco tiene ya 35 años y muchos kilómetros en la piernas. En otro tiempo, no sólo hubiese colgado las botas como consecuencia de la lesión, si no que ni siquiera hubiese tenido la opción de lesionarse, puesto que hubiera dejado la práctica profesional del fútbol algunas temporadas atrás. Otros jugadores como el eterno capitan de la Roma Francesco Totti, o el ex del Barcelona David Villa, también sufrieron graves lesiones, y regresaron al mundo competitivo del fútbol una vez recuperados.
El caso del italiano es especialmente significativo. Cumplirá el próximo mes de septiembre 41 años, y su larguísima y exitosa carrera deportiva la ha llevado a cabo solamente en el equipo de sus amores, La Roma. Nada más y nada menos que 24 años como profesional defiendiendo la camiseta del equipo italiano. El delantero asturiano David Villa es otro ejemplo de longevidad sobre los terrenos de juego y a buen nivel. Esta temporada juega en el New York City, y si bien la exigencia no es la de la Liga en España, Villa está dando muestras de su conocida calidad, todavía a sus 35 años.
Las razones por las que estos dos ejemplos, y otros muchos, se dan hoy día en el mundo del fútbol, son varios. En primer lugar, los avances en tecnología y en medicina, hacen que las recuperaciones de lesiones y la fiabilidad a la hora de regresar a la alta competición sean mucho mayores que años atrás. Los planes de preparación física son mucho más específicos y desarrollados, e inciden principalmente en la prevención.
Por supuesto que la exigencia competitiva y la repercusión mediática que ha adquirido el fútbol en los últimos años, ha forzado a este desarrollo y mejora de la condición física del futbolista. Hoy en día es impensable ver a un jugador 'rellenito' corriendo por el terreno de juego. Se cuida mucho más el estado físico y la nutrición.
Menos impactante es el caso de los porteros, puesto que la exigencia física del puesto es menor que la de cualquier jugador de campo. Ejemplos como el del italiano Buffon, el español Casillas o el checho Cech, tres porteros de clase mundial, y que siguen compitiendo en clubes de primer órden después de más de 20 años de carrera en algunos casos, nos dan una pista de hacia donde se dirigen las carreras profesionales de los futbolistas. En el caso de estos porteros, ni siquiera se atisba el ocaso de sus trayectorias.
Obviamente para extender una exitosa carrera deportiva como la de los futbolistas citados anteriormente, se requiere algo más que comer sano y estar en forma. Se necesita lo que todos ellos tienen, y en grandes dosis, talento natural para la práctica del fútbol.
Este aumento en los años de práctica profesional de las trayectorias deportivas de los futbolistas ha traído tambien como consecuencia el afloramiento y desarrollo de ligas menores en países sin tradición futbolera y que se han convertido en destino último o de retiro para alguno de los grandes de la historia del fútbol como Drogba, Xavi Hernández o Raúl González.
Quizás en algunas décadas exista algún futbolista cercano a los 50 años marcando o salvando goles para su equipo, aunque en este caso, quizás seamos nosotros a los que no nos alcance para verlo.